¿SABÉIS QUE LA OBESIDAD ES UNA ENFERMEDAD CRÓNICA?
¿Sabéis que altera la salud de quien la padece y predispone a la aparición de otras enfermedades crónicas como la hipertensión, la diabetes tipo II o las enfermedades cardiovasculares?
La obesidad es una enfermedad seria y cuando se da entre los niñ@s, éstos sufren desde pequeños y durante años consecuencias físicas, metabólicas, psicológicas y sociales. En España el 21,7% de los niñ@s de 3 a 12 años presentan sobrepeso y un 8,3 son obesos.
La infancia es la etapa de la vida en la que comienzan a establecerse los hábitos alimentarios y a partir de la adolescencia, estos hábitos adquiridos se hacen más resistentes al cambio, por lo que es en esta etapa cuando hay que incidir más en una alimentación saludable.
LOS DULCES
Consecuencias de la ingesta excesiva de dulces:
Los azúcares simples que contienen favorecen la aparición de caries.
Ocasionan problemas de sobrepeso.
Aumentan el riesgo de desarrollo de diabetes en la edad adulta.
Contribuyen a reducir la concentración de nutrientes de la dieta, por lo que aumenta la probabilidad de deficiencias nutricionales.
Deficiencias en la adolescencia de vitaminas B1 y B2.
Las golosinas aportan muchas calorías, poca proteína y de baja calidad, muy pocos minerales y nada de vitaminas.
Bebidas de cola: Al igual que el café, contienen cafeína. Una lata de refresco de cola contiene en torno a 40-55 mg de cafeína y altas cantidades de azúcar.
LA PIRÁMIDE ALIMENTARIA
La pirámide alimentaria es un gráfico que muestra la cantidad de alimentos que deben tomarse cada día. Las comidas se dividen en grupos que van formando los niveles de la pirámide. De unos debe comerse más y de otros menos, pero todos son necesarios para una alimentación equilibrada.Deben consumirse en abundancia los alimentos de la base de la pirámide, disminuyendo las cantidades del resto de los niveles conforme ascendemos.
Para llevar un estilo de vida saludable es necesario dormir 8 horas al día, realizar ejercicio físico moderado y beber de 6 a 8 vasos de agua al día.
UNA PROPUESTA SALUDABLE PARA PREVENIR LA OBESIDAD INFANTIL
Comer de todo. Una alimentación variada y equilibrada es una alimentación sana.
Desayunar siempre y de la forma más completa posible.
Cereales (pan, arroz, pasta), patatas y legumbres son alimentos básicos y tienen que formar parte de nuestra dieta diaria.
Moderar el consumo de grasas, especialmente las de origen animal.
Tomar todos los días frutas, verduras y hortalizas.
Moderar el consumo de productos ricos en azúcar, como golosinas, dulces y refrescos.